Hoy te presentamos una versión versátil y deliciosa de un áspic, esta vez de bonito. En su esencia, el áspic es una gelatina moldeada que custodia una variedad de ingredientes, lo que permite un sinfín de combinaciones. Desde frutas hasta vegetales, pasando por carnes y pescados, la experimentación es parte del encanto de este plato.

El áspic es muy apreciado en los países del este de Europa, pero también ha encontrado su lugar en la gastronomía española. Aquí, nos decantamos por versiones repletas de vegetales, huevos duros, carnes y, como en esta ocasión, pescados.

Además de esta propuesta, te instamos a explorar otras alternativas de este plato versátil. En particular, te recomendamos el Áspic de Verduras, una elección que conjuga la frescura de los vegetales con una presentación visualmente impactante. Es un plato que seguramente captará la atención de tus invitados en cualquier celebración.

En otra perspectiva, el Apio Relleno con Queso es una propuesta distinta pero igualmente cautivadora. Este plato combina la textura crujiente del apio con la cremosidad del queso, brindando un contraste de sabores y texturas que resulta una verdadera sorpresa para el paladar.

Áspic de bonito

    • Kcal
      182
    • Grasas
      4.8
  • Comensales:
    6
  • Cocina:
    Española
  • Categoría:
    Recetas Fáciles
  • Preparación:
  • Cocción:
  • Tiempo total

Ingredientes

  • Bonito asalmonado – 2 latas
  • Huevos duros – 2 unidades
  • Pimiento Morrón – 100g (1 Lata)
  • Cebolla – Media unidad
  • Guisantes – 150g (1 Lata)
  • Gelatina en polvo – 2 Sobres

Cómo se prepara

  1. El primer paso es preparar la gelatina siguiendo las instrucciones del envase con la única diferencia de echar menos agua de la indicada en el sobre. Si por ejemplo el sobre es para 1l de agua echaremos 2 sobres para cada litro. 
  2. El hecho de agregar la mitad del agua que se indica en el sobre nos asegurará de que la gelatina obtenida tiene suficientemente cuerpo como para aguantar bien todos los ingredientes que vamos a colocar dentro. 
  3. Ya con la gelatina diluida y aún caliente cogemos un molde o flanera y echamos una capa fina en el fondo y los bordes de la misma. Cuando ya terminamos de untar todos los bordes del molde procedemos a decorar poniendo unos guisantes en el fondo, unos pimientos morrones en los laterales junto con alguna hoja de perejil.
  4. Según vayamos terminando de decorar llevamos los moldes a la nevera y los mantenemos ahí hasta que la gelatina cuaje bien. Normalmente en 20 minutos suele cuajar pero si tenéis muy baja la potencia de la nevera puede que tarde algo más, antes de sacar os recomendamos probar si está cuajada o no.
  5. El siguiente paso es hervir los huevos aprox. 15 minutos para que queden bien duros y posteriormente pelarlos debajo del grifo para que se vayan enfriando. Una vez pelados los cortamos en rodajas y reservamos.
  6. Es hora de sacar el bonito de las latas, con mucho cuidado para que las piezas no se rompan demasiado, y las colocamos en la flanera junto a una rodaja de huevo, un poco de pimiento picado y una cucharadita de cebolla bien picada.
  7. Rellenamos el molde o flanera con la gelatina (tiene que estar templada o fría, no la echéis caliente) y volvemos a introducir en la nevera donde mantendremos aproximadamente 2 horas.
  8. A la hora de servir el áspic lo podemos volcar en un plato y decorar con una hoja de lechuga más unas rodajas de tomate y de esta forma dejar que se vean los ingredientes que lleva dentro o servirlo directamente en la flanera y decorar la parte superior con algo de perejil picado.