¡Hola! ¿Alguna vez has sentido la satisfacción de hacer tu propia masa para pasteles? Si la respuesta es si, entonces hoy es tu día de suerte porque voy a mostrarte cómo hacer masa quebrada casera, una receta simple y básica en la repostería que te permitirá crear una variedad de deliciosos platillos.

La masa quebrada, también conocida como pâte brisée en francés, es una masa sabrosa y delicadamente crujiente que sirve como base para numerosos pasteles y tartas. Su característica principal es su textura frágil y quebradiza que resulta en una mordida agradablemente crujiente.

Puede que te parezca un desafío hacer tu propia masa, pero déjame asegurarte que no hay nada más gratificante que ver cómo ingredientes simples como la harina, la mantequilla, el agua y la sal se transforman en una masa suave y elástica bajo tus propias manos. Además, una vez que aprendas a hacerla, las posibilidades son infinitas.

Por ejemplo, una vez que tienes tu masa quebrada, puedes aventurarte a preparar una serie de recetas encantadoras como una Quiche de verduras frescas y saludables, una Quiche de queso fundido y suave o incluso la clásica Quiche Lorraine, todas excelentes opciones para disfrutar en un brunch o una cena ligera.

No te preocupes si eres principiante en la cocina, esta receta de masa quebrada es tan fácil de seguir que estoy segura de que te saldrá perfecta en tu primer intento. Además, estoy aquí para guiarte en cada paso, darte consejos y resolver tus dudas a lo largo del camino.

Una vez que hayas dominado esta receta, te animo a que la compartas en las redes sociales y nos etiquetes. Me encantaría ver tus creaciones culinarias y escuchar tus experiencias. Así que, ¿qué te parece si empezamos a cocinar? Te prometo que no te arrepentirás de aprender a hacer tu propia masa quebrada casera. ¡Vamos allá!

Masa Quebrada

    • Kcal
      418
    • Grasas
      20.8
  • Comensales:
    6
  • Cocina:
    Internacional
  • Categoría:
    Masas
  • Preparación:
  • Cocción:
  • Tiempo total

Ingredientes

  • Harina de repostería – 150g
  • Mantequilla – 80g
  • Huevos – 1 unidad
  • Agua – 50g
  • Un poco de sal

Cómo se prepara

  1. Para obtener una buena masa quebrada vamos a tener que aislar el gluten de la harina de la siguiente manera: En un bol mezclamos los 150 g de harina con un poco de sal, una vez mezclado incorporamos la mantequilla previamente cortada en dados y frotamos con la mano hasta obtener una textura homogénea parecida a las galletas desmenuzadas.
  2. Una vez obtenida la textura que os comentaba antes incorporamos el huevo y 50 ml de agua. Hora de mezclar, pero cuidado; solo tenemos que mezclar hasta obtener la bola sin amasar demasiado. Una vez obtenida la bola la introducimos en un bol y tapamos con plástico para alimentos dejando reposar en la nevera durante 60 minutos.
  3. Transcurrido el tiempo la sacamos sobre la encimera ligeramente enharinada y pasamos el rodillo hasta obtener la forma del molde que vayamos a usar. Un truco para llevarla fácilmente al molde, aunque a estas alturas creo que todos lo conocemos, es enrollarla sobre el rodillo y extenderla sobre el molde.
  4. Para hornearla, hay que pinchar la masa con un tenedor por toda la superficie inferior sin llegar a atravesarla. Una vez hecho, coged un trozo de papel para el horno, arrugarlo bien y colocarlo en la fuente por encima de la masa. Encima del papel echar un kg de garbanzos o cualquier otro tipo de grano para generar un poco de peso y hacer que la masa no se levante con el calor.
  5. Deja que la masa se cueza durante unos 10/15 minutos. Transcurrido el tiempo, debemos retirar con mucho cuidado el papel de horno y los granos, para no desgarrar la masa. Recuerda, no hay prisa, la cocina requiere paciencia y mimo.