Aquí te traigo una receta de albóndigas de berenjena que podrás servir en tus reuniones familiares o de amigos como entrante o hacerle una salsa blanca y servirlas como un segundo plato, acompañándolas con un poco de puré ya sea de patatas o de verduras. 

Decirte que también las puedes hacer con una salsa de la abuela siguiendo los pasos que hay en el apartado de «Preparación de la Salsa» que se encuentra en la receta de albóndigas con salsa de tomate, que publiqué el otro día.

Si no las quieres servir secas pero quieres una opción con salsa para compartirlas, puedes preparar una salsa agridulce aunque nada mejor que coger un diente de ajo, majarlo bien y mezclarlo con un poco de mayonesa casera para así obtener un alioli suave donde la gente pueda mojar

Albóndigas de berenjena

    • Kcal
      295
    • Grasas
      9.2
  • Comensales:
    6
  • Cocina:
    Internacional
  • Categoría:
    Recetas con carne
  • Preparación:
  • Cocción:
  • Tiempo total

Ingredientes

  • Berenjena – 1 unidad (400 g)
  • Migas de pan duro – 4 cucharadas
  • Queso parmesano – 2 cucharadas
  • Aceite de oliva virgen extra – 4 cucharadas
  • Agua – 2 cucharadas
  • Huevos – 1 unidad
  • Perejil – media cucharadita
  • Cebolla – 1 unidad pequeña. 
  • Ajo – 1 diente
  • Sal y pimienta. 

Cómo se preparan

  1. Antes de encender los fogones, ve limpiando la cebolla y córtala en brunoise, una vez la tengas guárdala en un recipiente individual y ve picando el ajo, una vez lo tengas guárdalo sobre un plato de manera individual. 
  2. Por último elimina la piel a la berenjena y pícala finamente con un cuchillo si tienes una batidora de vaso, la puedes picar con ella pero ten cuidado que no se convierta en puré. Una vez picada ya puedes encender los fogones. 
  3. Calienta 4 cucharadas soperas de aceite de oliva y sofríe la cebolla junto con el ajo a fuego lento durante 5 minutos (No te olvides de echar un poco de sal). Pasado el tiempo incorpora la berenjena y sofríe hasta que la berenjena esté suave y tenga un color más o menos dorado. 
  4. Vierte el sofrito en un bol y mezcla bien con un huevo, las migas de pan, el queso parmesano y un poco de perejil picado. Una vez obtengas una textura homogénea, tapa el bol con un paño y déjalo en la nevera unos 15 minutos. 
  5. En una sartén calienta aceite de oliva o girasol, ve formando las bolas con la mano, pásalas por un plato con harina y fríelas a fuego lento. Cuando esté doradas  sácalas sobre un plato con papel de cocina para que vaya absorbiendo el exceso de grasas. 

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